
El político de moda.
Un fantasma familiar recorre Europa y se parece mucho a José Antonio Primo de Rivera. Su obra política fue resumida en un fogonazo de magnesio de Foxá: «La Falange es una hija adulterina de Carlos Marx e Isabel la Católica». Aquí solemos destacar más la maternidad nacionalcatólica de la criatura que su paternidad anticapitalista. ¿Cuántos tiernos votantes de Podemos, de esos que han oído hablar de patria por primera vez a Pablo Iglesias -¿alguien recuerda semejante palabra en boca de Rajoy?-, enmudecerían al descubrir que el lema del fascista Ledesma no reclamaba casta, Ibex y palcos sino «patria, pan y justicia»?
Cuando el Valle de los Caídos vuelve periódicamente a las tertulias lo hace siempre a propósito de Franco y no de su joven vecino de huesa, que es el que realmente está de moda. Luchó contra «una derecha que conserva hasta lo injusto y una izquierda que destruye hasta lo bueno». José Antonio estaba convencido de que a los pueblos los mueve la fe de los poetas, no la razón de los burócratas. Y así es, por desgracia: la tecnocracia parece replegarse en todo Occidente ante el retorno de las naciones como unidades de destino en lo americano, lo británico, lo francés y hasta lo catalán. No se trata de la nación cívica, que nace de un contrato respetado entre ciudadanos, sino de la psicológica: la nación como comunidad política imaginada o sentida. Desde ese presupuesto puramente desiderativo nada impide a Gibraltar constituirse en nación, ni tampoco a Getafe, como sospechaba Camba.
Hace mas años de los que es decente confesar, tropecé en un articulo de Amando de Miguel con ¿la boutade? de que leer a José Antonio era mejor para quienes aprecian la sintaxis y las ideas claras que leer a Karl Marx. Requería mucha chutzpa, que dicen los compatriotas de Marx, decir algo así en…no sé, ¿los sesenta, los setenta? Nada en absoluto a quien se ponga a leer ya sea por placer o por enterarse un poco. Pero tendría ud que separar galgos y podencos en la carrera de la falange desde los años treinta hasta ahora, y esa si es tarea para no acabar