
El destino se complace en los caprichos de la simetría, por decirlo a la manera del ídolo literario de Zapatero, y ha querido que coincidan en la librería los ajustes de cuentas de dos políticos retirados, opositores los dos, hombre y mujer, derecha e izquierda, Mariano Rajoy y Manuela Carmena. En Política para adultos el expresidente carga contra el populismo como si nunca hubiese sido adolescente. En La joven política la exalcaldesa arremete contra la política convencional como si nunca hubiese sido adulta. Carmena le saca una década a Rajoy, pero necesitaría muchas más para comprender que los presupuestos no se ejecutan a golpe de magdalena y que con buenas intenciones solo se hacen malas ordenanzas. Rajoy, por su parte, es el último forofo del reglamento en un mundo de certezas canceladas y escalafones derretidos.