
Gómez Traseira, Macarena. Natural de Córdoba, 42 años. Un vástago nacido de cohabitación conyugal con varón. Actriz profesional. Complexión tendente al canon heteronormativo. Veganismo no acreditado. Considerando su cuna, no se descarta que le gusten o hayan gustado los toros.
Se le imputan afirmaciones fuertemente subversivas que elevamos a la consideración del comité de Desviaciones, Resabios y Rajadas Patriarcales de España: el DERRAPE, dependiente del Ministerio de Igualdad. «Estamos forzando el feminismo, hay un discurso del odio contra los hombres», ha asegurado Gómez en entrevista no encriptada, accesible por tanto a través del dispositivo móvil para cualquiera de nuestras criaturas. La interfecta profesa la igualdad entre mujeres y hombres, pero no cree que estos sean más tontos que aquellas. Se resiste a denigrarlos. Llevada de la imprudencia que nace al calor de las conversaciones mal vigiladas -dicho sea en su descargo, si procediere-, manifiesta incluso que las mujeres necesitan a los hombres. Al poco del alumbramiento -técnica de parto pendiente de averiguación: no se descarta el uso de analgésicos no naturales- dejó a la nueva criatura al cuidado del progenitor no menstruante para reincorporarse al trabajo, recibiendo por ello las dosis previstas de autocrítica colectiva digital. Reconoce haber fregado en su propia casa.