Resistente.
Albert Rivera lleva días confinado dentro de un reactor nuclear. Sobrevive de momento a la radiación, pero Sánchez confía en achicharrarlo un poco más antes de relevarle en otro Chernóbil: el de una legislatura dependiente de Podemos y ERC. ¿Siente la presión, señor Rivera? Bueno, mi carrera es una historia de resistencia a la presión. ¿Pero no se ha bunquerizado en una posición que la opinión pública no entiende? Yo no conozco a la opinión pública nada más que cuando abro las urnas. ¿No conoce a Francesc de Carreras? Mucho. Pero con Cs empezó a equivocarse al poco de su fundación, y desde entonces no ha parado. ¿No nació Cs para dar estabilidad al bipartidismo? El PSOE nació para ayudar a los obreros y hoy es el partido preferido del Ibex y aliado de la burguesía soberanista vasca y catalana. A mí me votaron para oponerme a Sánchez, no para hacerle presidente. ¿Pero no cree que un Gobierno de PSOE y Cs sería bueno para España? Lo sería, claro, peroal frente del PSOE ahora hay un tipo tan interesado en cogobernar con Cs como yo en pactar con Otegi. Otra cosa es que su orwelliano aparato de propaganda difunda que se muere por moderarse mientras entrega Navarra y Baleares al nacionalismo. Sánchez es Sánchez. Y es irremediable.