Archivo de la etiqueta: beatería nacionalista

Salvador y misionero

El justiciable más influyente de la política española recibirá hoy en el extranjero la visita del presidente de la Generalitat, que es un hombre muy amable, como los Fernández. El mullido Illa acudirá a Bruselas, se tenderá en el suelo y rogará a Carles Puigdemont que lo pise en señal de penitencia por todas las veces en que lo acusó de haber huido de la Justicia. O por aquella ocasión en que juró que no habría amnistía «ni nada de eso». O por una vida entera de militancia progresista defendiendo que deben pagar más los que más tienen. Todo esto ocurrió en el cretácico, antes de que Pedro necesitase los siete votos de Junts para aprobar cualquier cosa, incluidos los presupuestos generales, que no son cualquier cosa pero como si lo fueran: como el propio papel ya mojado de la Constitución. Empapado en el grasiento escabeche de los mejillones belgas que constituyen desde hace siete años la dieta principal de nuestro prófugo.

Leer más…

1 comentario

2 septiembre, 2025 · 16:31

Zapatero en Suiza llama a Pedro

Todavía hay formas de viajar de incógnito en esta sociedad hiperconectada. Pongamos que un expresidente español necesita citarse en Ginebra con un prófugo de la justicia sin que nadie se entere. Se puede hacer: Suiza es un país habituado a la discreción, lleva décadas guardando los secretos financieros (y políticos) más inconfesables de su selecta clientela. Pero hoy en día el más tonto puede sacar su móvil y hacerte una foto inoportuna esperando en la cinta de equipajes con cara de párroco en un burdel; o saliendo de una tienda de suvenires con una caja de bombones para agasajar a tu interlocutor, que no en vano pertenece a una reconocida casta de pasteleros gerundenses.

Leer más…

1 comentario

17 agosto, 2025 · 7:18

¿Hay yanomamis en las rías gallegas?

Parece que la condescendencia hispánica ha cambiado de bando y ahora son los periféricos los que se burlan de los centralistas. Yo aún tarareo inocentemente aquel estribillo gamberro que Séptimo Sello aportó a la Movida: «Todos los paletos fuera de Madrid». Pero este verano un bar gallego ha sido noticia no por cerrar en agosto sino por la aparatosa xenofobia del motivo: «Si cae una bomba en Mera se quedan sin tontos en la Meseta». Hay paisanos míos que se han ofendido, pero a un verdadero madrileño -es decir, alguien venido de provincias que desprecia el peso del terruño en la conformación de su identidad y en la elección de su proyecto de vida- una frase como esa lo moverá mucho antes a la carcajada que a la indignación. Sobre todo porque si semejante declaración de hostilidad surtiera efecto y los mesetarios dejaran de veranear en aquellas hermosas rías, la economía gallega se vería dramáticamente devuelta a la edad del zueco, el azadón y la gallina. Bien lo sabe el astuto alcalde de Vigo, que cada navidad prende luces más grandes para atraer más carteras del resto de España.

Leer más…

2 comentarios

20 agosto, 2024 · 8:24

La era del populismo capilar

Esta década de eclosión populista habrá servido para revelarnos un vínculo insospechado entre la heterodoxia capilar y la ideológica. No hay demagogo con ambiciones que entre todos los conflictos que propugna no empiece por declararle la guerra al peine, símbolo del establishment que todo populismo viene a derrotar. Es como si las ideas alborotadas que bullen por debajo del cuero cabelludo necesitaran manifestarse también por encima, como una floración mutante, nutrida con abono de Chernóbil. Existen mil maneras de capilarizar el apetito revolucionario o reaccionario del populista; del látigo occipital de Iglesias al flamígero tupé de Trump, y del caos oxigenado de Boris a la calavera tintada de Berlusconi. En todos el peinado delata más de lo que oculta: una personalidad hirsuta, narcisa, desquiciada o perezosa. Pero aquí y ahora nos interesan los perfiles pilosos de Javier Milei y Carles Puigdemont.

Leer más…

1 comentario

21 mayo, 2024 · 8:12

El héroe que pudo ser Gabriel Rufián

Por si fuera poco drama el desplome de su partido y la dimisión de Aragonès, Gabriel Rufián tiene que soportar que Figo se mofe de él en las redes. ERC arrancó a don Gabriel de su baja de paternidad para que acudiera a tapar vías de agua en precampaña. Incluso pactó con Sánchez la pregunta sobre su fe en la Justicia que sirvió de preámbulo al psicodrama del divo en fuga. Rufián ha sido un jornalero de la bronca, un aplicado obrero del muro, un charnego reclutado durante el procés para medirse libra por libra con la chulería mesetaria. Rufián era el Joselu del parlamentarismo que nos solucionaba la crónica en el minuto previo al bostezo final. Lo mismo te blandía una impresora que exhibía unas esposas o depositaba solemnemente tres balas sobre el atril, precipitando en Pedro otra de esas lipotimias impostadas con las que aspira a que la causa (la masacre de Melilla) quede sepultada bajo la sobrerreacción.

Leer más…

Deja un comentario

14 mayo, 2024 · 13:58

Taxista catalán

Sucede el lunes por la noche en el taxi que me devuelve a Barcelona desde Terrassa. El conductor, un hombre ni joven ni viejo, maneja con silencioso orgullo un bello Tesla que habría emocionado a Marinetti. Parece simpático. Se me ocurre preguntarle por las elecciones, motivo de mi viaje a Cataluña. Y entonces rompe a hablar, el recelo derrotado por la jovialidad, con esa clamorosa falta de prudencia que solo pueden permitirse los niños y los taxistas.

Leer más…

Deja un comentario

13 mayo, 2024 · 11:22

El viaje a la semilla de Alejandro Fernández

El trayecto que va de Alejo (Vidal-Quadras) a Alejandro (Férnandez) cuenta una historia de numantinismo mutante: a menudo desesperado, ocasionalmente esperanzador, nunca triunfal. Porque militar en el partido de Fraga y de Aznar y de Rajoy en Cataluña, sin llegar a las cotas de heroísmo que exigieron los años de plomo en el País Vasco, jamás ha deparado demasiadas satisfacciones. Pero el que aguanta y se queda tiene sus motivos, y son tan catalanes como españoles.

Leer más…

Deja un comentario

13 mayo, 2024 · 11:20

La España futura de Victoria Prego

Que el separatismo sea residual entre los jóvenes catalanes debería no solo tranquilizar a los conservadores sino también bañar en humildad a los progresistas: hasta la ingeniería plurinacional mejor financiada tiene sus límites. Por lo demás la noticia consternará a un número creciente de conservadores separatistas, esos españoles hartos que fantasean con perder de vista a Cataluña de una santa vez. En cualquier caso el futuro parece escrito: Cataluña se queda. El furor doctrinario del nacionalismo y la sumisión estratégica del PSOE habrán servido para envilecer la convivencia, asegurar los sillones de una casta y enriquecer a un puñado de corruptos envueltos en esteladas, pero se estrellarán contra la indiferencia mayoritaria de los catalanes de mañana.

Leer más…

Deja un comentario

7 mayo, 2024 · 13:25