
Lo único que ha escrito Pedro del libro que anda promocionando es el título y ya sabemos por qué. Tierra firme es la metáfora del presupuesto público saqueado por las zorras sin uvas del partido, de la academia o de los medios -valgan las redundancias- que pusieron bajo sospecha la meritocracia cuando les resultó inalcanzable y se entregaron al pillaje colonial con los gayumbos a la altura del tobillo. Viva Pedro, que nos salva del fascismo y la intemperie laboral: apuremos el enchufe mientras dure y tonto el último. Que no quede una sola institución sin su gusano.






